Por Aymee Amargós.
El hombre deviene en lo que quiere ser y mientras más altas las aspiraciones, más logramos hacer.
Desde muy joven Nazario Salazar se apropió de la cultura alfarera. Un camagüeyano que ha transitado por la pintura, el diseño grafico y ambiental, la escenografía, el vestuario, el dibujo y la cerámica. Ahora incursiona en el diseño digital.
Lleva 50 años de entrega al arte.
“Comencé muy joven, aprendí ese oficio de mi padre, que fue mi guía y mi ejemplo”
Cuando trabaja una pieza hace que prevalezca la originalidad y una textura tradicional. Toma en sus manos la arcilla y convierte el barro en obras artísticas.
En sus piezas existe una interrelación entre la cerámica, la pintura y el dibujo Tres de sus grandes preferencias creativas.
En ocasiones emplea como detalle el calado .Una modalidad asiática.
Ha sido calificado como un hacedor de milagros .Para Nazario Salazar no existe barrera entre lo utilitario y lo creativo.
Es el director de los proyectos “El barro de mi barrio” y del colibrí de arte miniaturista. También es uno de los fundadores del simposio internacional de cerámica artística con celebración bienal.
Pretende no quedar fuera de la contemporaneidad.
En su visión de José Martí, lo adivinamos en depurada técnica, reverdeciendo entre la floresta, donde se evidencia la actualidad de su pensamiento.”la naturaleza inspira ,cura, consuela, fortalece y prepara para la virtud al hombre…”
Nazario logra mezclar acertadamente su sensibilidad de hombre y artista siguiendo la máxima martiana de que…”los que sienten la naturaleza tienen el deber de amarla.”
Ha realizado por casi cincuenta años una labor instructiva y creadora que ha dejado huellas ineludibles en el quehacer de la plástica en el territorio.
Como reconocimiento a la obra de la vida mereció en el 2009 el Premio Fidelio Ponce de León que otorga el Consejo Provincial de las artes Plásticas en el territorio junto a otros lauros de instituciones culturales.
En su peculiar e inconfundible manera de concebir las piezas Nazario Salazar combina oficio y un convincente lirismo.
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